Un león en Old Trafford

Son innegables las raíces británicas futbolísticas tanto en Bilbao como en Vizcaya. Se forjo el término de Alirón, derivado de la expresión inglesa All Iron, en las minas de esta región. En la “campa de los ingleses” se empezó a jugar a fútbol. Primero los propios ingleses y mas tarde los bilbainos enfrentándose a ellos. Aquí se encuentra el germen del Athletic. Un Athletic que se enfrenta esta semana en el partido de vuelta al Manchester United.

La semana pasada se enfrentaron en Old Trafford y 8.000 seguidores invadieron pacíficamente Manchester. Ya desde el miércoles (la partido se jugo el miércoles) se distinguía a la afición del Athletic por la ciudad. El día del partido todo el centro de Manchester estaba “conquistada” por todos los hinchas que habían ido a disfrutar del partido. 8.000 son muchas personas, se dice que uno de los pubs mas grandes de la ciudad acabaron sin cerveza, nos comentaron que en el Hard Rock Café sirvieron Kalimotxo. Los Bobbies se sacaban fotos con los aficionados y se disfruto de un gran ambiente durante todo el día.

Y por fin el partido, como aficionado además de disfrutar cada domingo de San Mames y haber vivido grandes experiencias en el, a pesar de haber ido al Camp Nou, Bernabeu, disfrutar de la final de copa en Mestalla la visita a Old Trafford me motivaba extraordinariamente (solo remitirme al primer párrafo del articulo). Al llegar allí me emocione, ver la fachada.

Entramos a la grada del equipo visitante y vimos la escultura a Best, Charlton y Law. Al entrar al campo no pude evitar sacar fotos de ese “templo futbolístico” y pensar lo afortunado que era de poder animar a mi Athletic en Old Trafford. Comenzó el partido y además de disfrutar de la ciudad no me pude imaginar todo lo que disfrute en el partido, ¿Quién me iba a decir que iba a disfrutar en Old Trafford? Las 8.000 gargantas que ahí estábamos disfrutamos como nunca. Solo se oía gritos de ánimo al Athletic y cuando la afición local intentaba animar a su equipo ya nos encargábamos de callarlos con gritos de ánimo a los leones. El gol de Rooney no nos importo, se veía que este Athletic quería y podía (hay que reconocer que no parece que les motive mucho la Europa League a los ingleses pero a nadie le gusta perder y menos a un equipo del nivel del United.) Marco Llorente el 1-1 y descanso (faltaba el bocata de San Mames, todo no pudo ser) En el descanso recibí, mensajes llamadas de gente de casa emocionadísima y ¡solo estábamos empatando! Ya en el segundo tiempo el Athletic consiguió lo que nadie creía, marcar 2 goles más y ponernos 1-3. He de reconocer que alguna lágrima de emoción ya eche. Después de la exhibición realizada tanto en el campo como en la grada la afición del United, aplaudía a nuestro equipo a nosotros y nos daban la mano. Unos niños nos pidieron la bufanda del Athletic que obviamente consiguieron. Al finalizar toda esa explosión de jubilo los comentarios de los que estuvimos allí eran “como la semifinal contra el Sevilla”, “incluso mejor que la final de copa”.

Ahora queda rematar el trabajo en San Mames el jueves, a finalizar un trabajo que comenzó en una eliminatoria de Copa de Europa en 1957.