Equipo a la fuerza

Los aficionados al football recordamos sin duda aquella película de Keanu Reeves y Gene Hackman en la que, por una huelga de jugadores, una franquicia decide hacer un equipo de juegadores de reemplazo. Goodell debió inspirarse en ella para  jugarse el órdago con el tema de los árbitros esta temporada, y parece que la maniobra no esta teniendo el éxito que si tuvo el equipo de "Pasitos" Falco.

Desde que empezase la nueva temporada de la NFL el tema recurrente más allá del juego, de los equipos, del deporte ha sido el de los "cebras". La huelga del colectivo arbitrar y su sustitución por árbitros de reemplazo ha dado mucho que hablar, ha tenido tremendas consecuencias e incluso algunos han llegado a decir que tanto hablar de árbitros contribuyen a la "soccerización" del juego. El problema es que que ha sido una malísima idea contar con este "parche".

Hay que dar las gracias desde luego a estos árbitros amateur, porque sin su labor este año también habríamos estado con la amenaza de otra temporada sin NFL. Y tampoco es culpa suya la cantidad de errores garrafales que estan cometiendo, la culpa es de quienes han tomado la decisión de ponerles ahí.

Y es que en estas tres semanas hemos visto de todo. Hemos visto errores de apreciación en las jugadas, distintos raseros a la hora de pitar determinadas infracciones a un equipo o a otro (siendo el mismo equipo arbitral), pañuelos tirados a destiempo cuando ya se esta casi iniciando la jugada siguiente, no saberse los nombres de los jugadores a los que están amonestando e incluso regalar tiempos muertos a algunos equipos. Se ha incrementado el número de penalties en los partidos parándolos constantemente y rompiendo un ritmo de juego que ya de por sí es lento (por las propias características del deporte).

Y no son solo ya estos errores es también la falta de respeto tanto de jugadores como de entrenadores protestando cada decisión, encarándose e intentando intimidar a estos árbitros de reemplazo a sabiendas de que no tienen las mismas tablas que los profesionales. Por suerte, algunas de estas actitudes han sido multadas.

La "Interecepción"

Pero cuando nos encontramos con casos tan evidentes de negligencia como el de el "Monday Night Football" entre Packers y Seahawks donde se da por buena una anotación que no tendría que serlo y que se puede apreciar de forma evidente en las repeticiones (y todas las anotaciones son revisadas, recordemosló) es para exigir a Gooddell o a quien corresponda el tomar una determinación para resolver este asunto cuanto antes. Hablamos de un error que cambia el resultado de un partido y que podemos interpretar como una adulteración de la liga en toda regla.

Los árbitros profesionales no son infalibles, también han cometido errores igual de sangrantes que este, pero mientras sean estos árbitros los que esten pitando, con acierto o desacierto, estarán siempre en el ojo del huracán y se les recriminará cada fallo con una virulencia que, quizás, no veríamos contra los árbitros de siempre. Ellos cuentan como escudo con una autoridad que jamás podrán tener los actuales árbitros suplentes.

De haber arbitrado los "pros" ¿Hubieran tuiteado Clay Mathews y el senador de Winsconsin Jon Erpenbach el teléfono de la oficina de Goodell?

Maykel Pérez / @Greypilgrim